En 1.963 se presentó en la feria de muestras de Barcelona el SEAT 1500, que no era más que una versión mejorada de su antecesor, el SEAT 1400 C. En Noviembre de ese mismo año se puso a la venta el definitivo SEAT 1500, derivado del italiano FIAT 1800, con el que compartía unas líneas claramente influenciadas por  la moda americana de la época  (aletas traseras,  abundantes cromados, etc) pero con un motor más sencillo, adaptado al precario mercado español.

El 1.500 fue muy bien acogido gracias a su solidez, comodidad (estaba homologado para 6 plazas) y prestaciones (alcanzaba los 140 km/h y entregaba 72 CV). A todo esto había que sumarle una autonomía de 630 km, proporcionada por su gran depósito de 60 l y por un consumo de 10l a los 100 km, contenido para un coche de su tamaño en esa época. En 1.968 se le realizaron las primeras mejoras, como la instalación de frenos de disco, sustitución de la dinamo por un alternador y montaje de nuevas llantas sujetas por cinco tornillos en vez de cuatro. También se suavizó el manejo de la caja de cambios y la dirección, para hacerlas menos duras.

En 1.969 se presentó la segunda versión, con mejoras exteriores como las dobles ópticas delanteras, un doble embellecedor lateral cromado y unas protecciones de goma en los parachoques. Mecánicamente destacaron dos importantes novedades; el incremento de potencia de 3 CV (gracias al aumento de la compresión, la longitud de los colectores de escape, y una mejora del árbol de levas), y la incorporación de un motor diesel de 1.800 c.c. de origen Mercedes, mucho más económico (con un consumo de 6,8 l a los 100 km de un combustible más barato) anque de mucha menor potencia, ya que solo le permitía al coche alcanzar los 103 Km/h.